“Denen artean erabaki genuen gure lanpostuen alde borrokatuko genuela eta geldirik ez ginela egongo”
Ikasle Sindikatuko eta Emakume Aske eta Borrokalariak-eko kideok Elena elkarrizketatu dugu, Dia supermerkatuko langilea eta ELAko ordezkari sindikala. Hainbat langilek, tartean Elenak, greba mugagabea bultzatu zuten duela hilabete batzuk eta garaipen garrantzitsuak lortu dituzte antolakuntza eta mobilizazioari esker. Hori dela eta, gure elkartasun osoa bidaltzen diogu berari eta bere kide guztiei.
Desde Ikasle Sindikatua y Emakume Aske Eta Borrokalariak de Bizkaia hemos entrevistado a Elena, trabajadora de la cadena de supermercados Dia y delegada sindical de ELA para conocer sobre la lucha que ha llevado a ella junto a otras muchas trabajadoras a protagonizar una huelga indefinida hace unos meses y lograr importantes avances gracias a la organización y la movilización. Desde aquí le mandamos a ella y a todas sus compañeras todo nuestro apoyo y solidaridad.
Ikasle Sindikatua: ¿Cuál es el origen de vuestro conflicto?
Elena: El origen empieza en el hartazgo por la falta de personal en las tiendas, y cada vez va habiendo menos. Entonces dan comienzo una serie de protestas que finalmente llevan a unas movilizaciones en diciembre en 2017. En 2018 organizamos días de huelga para que la empresa se reuniera con nosotros y nos cubriese por lo menos vacaciones, bajas, excedencias… Nuestro sindicato – ELA – tiene además la mayoría absoluta en los tres territorios. Cuando reivindicamos un convenio en la CAV recibimos la notificación del ERE: el 8 de febrero. Ahí arranca el conflicto más importante, cuando nos notifican que va a haber un ERE en la empresa que afecta a nivel estatal a más de 2000 personas y a 61 en el País Vasco, con catorce tiendas en Bizkaia que se iban a cerrar y 4 en Gipuzkoa. La gente decide que hay que movilizarse, que no podemos esperar a ver qué dicen unos, a ver qué dicen otros.
La gente se echa a la calle y 100 trabajadoras y trabajadores participan en la primera asamblea. La gente no cabía en el local de ELA de Bilbao, no nos podíamos sentar. Entre todas decidimos que íbamos a pelear nuestros puestos de trabajo y que paradas no íbamos a estar.
Desde CCOO no creían que la mejor opción fuera manifestarse y hacer días de huelga. Dicen que hay otros medios y otros modos. Ellos las peleas las hacen en las mesas negociadoras, no en las calles. No nos pasaban información y encima trataban de boicotearnos todos los días de huelga, mandando mensajes diciendo que la lucha se hace en las oficinas no en las calles y que no podemos parar las tiendas ante el ERE porque lo que producirá será más despidos. Lo único que consiguieron es cabrear a la gente.
La gente salía en masa al principio. Hicimos primero dos días de huelga 27 y 28 de febrero, también el 5 de marzo. El 8 de marzo salimos a la huelga por el 8 de marzo, y el 11 de marzo iniciamos la huelga indefinida.
IS: ¿En qué situación estáis ahora? ¿Cuáles son vuestras principales reivindicaciones?
E: La situación actual es que, de los 36 despidos para Bizkaia han salido 14 despidos de intercambiabilidades y 7 despidos forzosos. De esos 7, 3 personas eran afiliadas nuestras que han podido reincorporarse en vacantes que han salido, con lo cual despidos forzosos 4.
Ahora mismos las mayores reivindicaciones son que se cubra todo el personal y el convenio. Queremos hablar conjuntamente con la empresa y la empresa está dispuesta a hablar con nosotras. A cuenta de las huelgas conseguimos, en vez de tener una silla en Madrid, que Madrid venga a hablar con nosotras.
IS: Gracias a vuestra lucha habéis conseguido una gran victoria: que las tiendas de Día se mantengan cerradas por las tardes en verano.
E: La empresa quería que abriéramos por las tardes porque “si cuela, cuela”. Nosotras tenemos una sentencia aquí, que afecta a Bizkaia, para no tener que abrir por las tardes en verano. Es un derecho que hemos adquirido y que únicamente tenemos aquí, en Bizkaia. Al enterarnos, llamamos a la empresa y les dijimos que “o sigues lo que marca la sentencia o vas a tener concentraciones todos los sábados en las puertas de las tiendas”, y la empresa sabe que hablamos en serio. Así que después de nuestra llamada y como fruto de la lucha que habíamos llevado a cabo, las tiendas que cerraban van a seguir cerrando.
IS: ¿Qué ha significado para las trabajadoras el haberse incorporado a la lucha?
E: Ha sido una situación súper dura, la verdad. El sindicato nos apoya económicamente, cuando hacemos huelga nosotras no nos quedamos sin cobrar, nos paga la caja de resistencia. Pero cuando llega la nómina y no has cobrado… ostras. Mientras preparas cómo vas a hacer las concentraciones tú estás motivando a la gente pero cuando tú te hundes, tus compañeras te levantan. También hay que luchar contra las amenazas por parte de las supervisoras: “No te preocupes que a ti no te van a despedir, no te va a afectar”, que es mentira. O cuando nos dicen ”como luches la primera que vas a salir vas a ser tú , te van a quitar 200€ de sueldo”.
La empresa se sentó a hablar con nosotras, decidimos ver lo pasaba con las intercambiabilidades, y el 2 de abril nos reincorporamos al trabajo. Era increíble la fuerza que se respiraba: las trabajadoras que más habían impulsado la huelga no querían desconvocarla.
El 20 de marzo fuimos en autobús a Madrid a manifestarnos porque allí se reunía el consejo de accionistas y decidían si vendían las acciones a un accionista ruso o no. Ahora mismo vas a hacer las visitas por las tiendas y te encuentras a gente que igual no ha hecho la huelga indefinida (LAB por ejemplo decidió en medio del conflicto que no iba a continuar con la huelga indefinida) pero hubo trabajadoras afiliadas a LAB que vinieron con nosotras en nuestro autobús. Allí se unió mucho la gente y sobre todo nos ayudó a organizarnos, especialmente porque en las tiendas trabaja poca gente y no nos conocemos entre todas.
Antes de terminar, quería resaltar que nos hemos unido mucho y que la gente se ve reconocida, que su esfuerzo se ve reconocido. Están más confiadas. Saben que tú peleas por tus derechos y que no pasa nada.