¡Basta ya de recortes y contrarreformas franquistas!
En las pasadas elecciones del 20D, la movilización que millones de jóvenes y trabajadores hemos protagonizado en las calles en estos años se trasladó también a las urnas. El vuelco a la izquierda en los resultados, además del enorme varapalo que se llevó el Partido Popular, provocaron sudores fríos a los banqueros y a los grandes poderes económicos que quieren seguir imponiéndonos su receta de recortes y austeridad para la mayoría, para que ellos puedan seguir viviendo a cuerpo de rey.
Desde entonces hasta ahora, han hecho todo lo posible por evitar un gobierno de izquierdas. Algo para lo que han contado con la estrecha colaboración de la dirección del PSOE, que ha preferido dar la espalda a todos los que les habían votado y posicionarse con la derecha 2.0 de Ciudadanos para intentar formar un gobierno que continuase aplicando la política de la Troika.
La oligarquía tiene miedo
Pero la fuerza que hemos demostrado en estos últimos cuatro años en la movilización sigue muy viva: Las Mareas, las Marchas por la Dignidad, el movimiento contra los desahucios, contra la Ley Mordaza. También en Euskal Herria hemos protagonizado importantes movilizaciones contra los recortes a la educación pública, los despidos de profesores, los ataques al euskera, contra la represión y la criminalización de la juventud y por el derecho a decidir… todos los que hemos llenado las calles una y mil veces, tenemos muy claro que nuestro objetivo es desalojar a la derecha del poder. En ese sentido, PNV y PP se han caracterizado por seguir las mismas líneas estratégicas defendiendo los mismos intereses: los de las élites económicas, a costa de atacar las condiciones de vida y los derechos de la mayoría.
Echar de una vez a aquellos que gobiernan para las élites mientras nos lo niegan todo a la inmensa mayoría es una necesidad urgente para los jóvenes que provenimos de familias trabajadoras. Ya no es sólo la educación que no es negada a través de tasas que no podemos pagar o los recortes a la pública, sino el futuro que nos espera de la mano de las recetas de la Troika que tanto PNV como PP aplican gustosamente. Hoy la tasa de desempleo juvenil en la CAV alcanza el 40% y la precariedad alcanza niveles nunca vistos. ¡No nos engañan con su demagogia barata! Ese es el futuro que el PNV nos ofrece en Euskal Herria y el que el PP impone a la juventud en todo el Estado.
Unión de la Izquierda que lucha en Euskal Herria para barrer al PNV y al PP
La unión de todos los que sufrimos esos ataques es fundamental para poder pararles los pies. No hay más que ver el entusiasmo que ha provocado el acuerdo entre IU y Podemos a nivel estatal. La posibilidad de que en las elecciones del 26J la suma de Podemos e IU, En Común Podem (Catalunya), En Marea (Galicia), y otras confluencias de la izquierda obtengan un tremendo resultado, superen al PSOE y pongan sobre la mesa la posibilidad de un gobierno que rompa con los recortes y la austeridad es una idea que provoca auténticas pesadillas entre los que defienden las políticas contra la mayoría.
Rajoy, Urkullu, Albert Rivera, Felipe González, la CEOE, y los capitalistas de (otros paises) fuera de nuestras fronteras, están muy preocupados porque este escenario de avance de la izquierda se haga realidad. Las alabanzas de la UE y el FMI a las reformas del PP y sus exigencias de nuevos recortes inminentes dejan muy claro que su intención es seguir por el mismo camino. Por supuesto, ya sabemos de dónde querrán sacar el dinero. Como siempre, de la educación y la sanidad públicas, de las prestaciones al desempleo, de las pensiones… ¡No lo podemos permitir!
Por eso tiene tanta importancia trabajar por la confluencia de la izquierda que lucha en Euskal Herria para echar a la derecha. La unión de la izquierda abertzale y Unidos Podemos para acabar con los planes del PNV y el PP sería una fuerza arrolladora.
Derrotar a la derecha en las urnas y en las calles
Desde Ikasle Sindikatua llamamos a todos los estudiantes, y a la juventud en general, a llenar las urnas con toda la lucha que hemos llevado a cabo en los últimos años. Tanto el voto a EH Bildu como a Unidos Podemos, debe ser el principio de una alianza sobre la que se levante un programa de ruptura con las políticas de los grandes empresarios y los banqueros, para así barrer al PNV y al PP en las urnas y en las calles. Un programa que incluya las reivindicaciones de la mayoría social: la derogación inmediata de la LOMCE, del 3+2 y la reversión de todos los recortes a la educación pública, la defensa real del euskera a través de la educación pública; la derogación de la reforma laboral y la Ley Mordaza; la defensa de los derechos democráticos; el fin de las privatizaciones, la prohibición por ley de los desahucios, y la defensa de la sanidad pública, gratuita y universal; el aumento del SMI y la lucha contra la precarización y los salarios miserables para la juventud; la solidaridad real y efectiva con nuestros hermanos y hermanas refugiados…
Pero votar no es suficiente. Ninguna suma de parlamentarios evitará que las élites capitalistas que dominan la sociedad aticen el boicot y la presión salvaje contra un gobierno que quiera gobernar a favor del pueblo, los trabajadores y la juventud. Las lecciones de lo ocurrido en Grecia son muy claras al respecto. Si queremos cambiar las cosas de verdad, si queremos transformar la sociedad, hay que romper con la lógica del capitalismo, con la Troika, con las imposiciones del capital financiero, de la única manera posible: a través de la movilización contundente, masiva y sostenida en el tiempo, como están haciendo los trabajadores y jóvenes de Francia. En esta línea, el Sindicato de Estudiantes vuelve a reiterar su compromiso con los derechos de la juventud: si los recortes educativos no se retiran, si la LOMCE y el 3+2 no se derogan inmediatamente, organizaremos huelgas generales y movilizaciones contundentes a principio del próximo curso.
¡Todos y todas a las urnas el 26J para derrotar a la derecha!
¡Todos y todas a las calles en el próximo curso hasta conseguir la derogación de la LOMCE, del 3+2 y un futuro digno para la juventud!
